26.3.11


[...]I hate to present my head over my heartBut I can not do something to remedy itWhy the hate I feel, touches my soul and destroyed [...]



Tumbada boca abajo escuchaba esa canción que parecía ser más que unos simples versos. 
No era capaz de quitarse aquella sensación de injusticia que aparecía siempre con esas personas. Por eso, a los engranajes de aquel corazón herido de bala, les costaba más aún recuperarse. Nunca conseguiría aquel objetivo, nunca vería más allá y jamás podría elegir correctamente.
Se odiaba.

No hay comentarios: