Pues bien, si yo hoy fuera un tío, me estaría atragantando con ellos.
Que por qué, te preguntarás. Todo es a causa del miedo que tengo. Ese maldito miedo que se te enreda en el estómago y no te deja, ése que tanto conoces.
Ni la velocidad del viento lo ha arrastrado a otro lugar, ni siquiera cuando he decidido pedalear más y más rápido para que me dejara. Únicamente me ha dejado en paz cuando me he dado cuenta de que el dolor de mis piernas era más agudo que el miedo.
Y es que no puedo soportar la incertidumbre que me quiere acompañar día a día. El echo de no saber si el mañana aparecerá totalmente nublado y no hubiera más sol o que ni siquiera
Que estoy acojonada joder. MUY ACOJONADA.
Que lo único que quiero es que el resultado de tú+yo sea un de por vida elevado a infinito más uno.
Que te quiero Laura Carrillo. T-E--Q-U-I-E-R-O.
Pero es ese miedo lo que me paraliza muchas veces.
No hay comentarios:
Publicar un comentario